Los alumnos/as del primer ciclo de secundaria han participado en el viacrucis que se prepara desde la asignatura de religión. Una experiencia de prácticas religiosas en donde la Iglesia nos invita a conectar con Jesús, recordando su entrega amorosa. La cruz de Jesús solo tiene sentido por el gran amor que puso en cada paso que dio para acudir al encuentro de los que sufrían por el rechazo, por la pobreza, por la enfermedad, por la soledad. Ojalá que cada uno de los creyentes en Jesús sigamos sus pasos de amor incondicional.
